Antes de despedirnos de Yosemite, vamos a hacer una visita al Mariposa Grove. No podemos irnos de aquí sin haber visto una enorme secuoya.
En Mariposa Grove hay dos párquings, nosotros llegamos temprano, sobre las 9h y ya no había sitio en el párquing más cercano, pero no hay problema, hay un shuttle (gratis) que te acerca a la entrada principal, donde comienza el recorrido entre secuoyas, esos árboles gigantes y que pueden llegar a vivir hasta 3.000 años, superando los 100 metros de altura.
El recorrido es cuesta arriba, se puede hacer a pie o con un trenecito que va haciendo las paradas en las secuoyas más importantes.
Nos encontramos con el Fallen Monarch, una enorme secuoya caída hace tres cientos de años, que nos sorprende con la forma de sus raíces...
Fallen Monarch |
Nosotros no hicimos el recorrido completo, porque no queríamos que se nos hiciera tarde para nuestro próximo destino, pero vimos las secuoyas más importantes como Bachelor & Three Graces, Grizzly Giant, General Sherman...
Grizzly Giant
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California Tunnel Tree |
Era hora de ponerse rumbo a Los Angeles, desde Mariposa Grove teníamos unas 4 horas de trayecto, prácticamente todo por autopista. Paramos a comer en un Denys Diner, en el que volvimos a comer muy bien y llegamos a nuestro motel poco más tarde de las 17h. Para esta noche habíamos reservado el Saharan Motor Hotel. Lo elegimos por su ubicación y precio, ya que esta tarde la íbamos a dedicar a la zona de Hollywood, y quedaba muy cerca.
Dejamos las maletas, y nos pusimos en marcha para visitar Los Ángeles. LA es enorme, y las distancias porsupuesto también, la verdad que no sé como sería visitar LA en transporte público, porque ni nos lo plantemos, pero creemos que lo mejor es llevar tu propio coche, y dejarlo en párquings, que, para nuestra sorpresa, no nos parecieron nada caros.
Aunque estábamos cerca del hotel fuimos en coche para no perder mucho tiempo. Dejamos el coche en el párquing del Dolby Theatre y al salir nos invade una sensación de agobio impresionante. Veníamos de disfrutar de la grandeza de la naturaleza y ahora nos veíamos en una aglomeración de gente descomunal.
Aunque estábamos cerca del hotel fuimos en coche para no perder mucho tiempo. Dejamos el coche en el párquing del Dolby Theatre y al salir nos invade una sensación de agobio impresionante. Veníamos de disfrutar de la grandeza de la naturaleza y ahora nos veíamos en una aglomeración de gente descomunal.
Con esta sensación intentamos disfrutar del Paseo de la Fama de Hollywood, en el que no cabía ni un alfiler. Y poco a poco nos vamos acostumbrando a tanta gente.
La estrella de Robin Williams estaba engalanada con flores y dedicatorias al actor que había fallecido unos días antes.
Primero pasamos por delante del Teatro Chino, donde vimos las huellas de pies y manos de los más grandes del mundo del cine.
Teatro Chino |
Y una vez recorrido la parte de Hollywood Boulevard que más nos interesaba, cogemos el coche, no hay tiempo que perder para poder subir al Observatorio Griffith. Igual que nosotros había mucha gente que también decidía subir en ese momento, y nos econtramos con un superatasco, y más tarde comenzó la aventura de encontrar un sitio para nuestro Mustang. OJO al aparcar en Los Ángeles, vimos un policia multar a muchos coches y no sabíamos por qué, parecía que estaban bien aparcados. Le preguntamos y nos dijo que no se puede aparcar en "wrong way", por eso estaba multando a todos los que habían aparcado en el sentido contrario del carril. O_O
Las vistas desde aquí de toda la ciudad de LA son impresionantes. La grandeza de la ciudad y la enorme nube tóxica que cubre el cielo, aun asíe distingue perfectamente zonas como el Downtown.
También se puede entrar dentro del edificio, donde hay una exposición del cosmos y el mejor planetario del mundo, según dicen. Nosotros entramos dimos una pequeña vuelta entre planetas y compramos algún que otro souvenir.
Y de nuevo bajamos cerca de nuestro motel, donde paramos a cenar en un Jack in the box, que por cierto tengo que decir, que no nos gustó nada.