lunes, 12 de enero de 2015

DIA 7. GRAND CANYON (AZ), RUTA 66: WILLIAMS (AZ)

18 de Agosto de 2014.

Empieza uno de los días de los que teníamos más ganas, íbamos a ir a Grand Canyon!! Uno de los parques más conocidos mundialmente. 
Después de un buen desayuno en el Travelodge Flagstaff, situado en la misma ruta 66, vamos a hacer unas compras a una de las muchas tiendas de informática que hay en la ciudad.  

Entramos a Grand Canyon por South Rim, es la entrada principal y está abierta todo el año, y desde Flagstaff lo teníamos a unas 80 millas. La otra opción es entrar por North Rim, pero esta entrada solo está abierta de mediados de mayo a mediados de octubre, y también dispone de menos servicios. 

Pues bien, cuando estamos haciéndonos las fotos de rigor con el letrero de "Grand Canyon" empiezan a caer las primeras gotas. No pasa nada, parece que son cuatro gotas y ya está... pero a medida que vamos adentranos hasta llegar al Visitor Center.... la cosa iba a más... tanto que no nos atrevíamos ni a salir del coche con la que estaba cayendo. El cielo se tornó negro, se veían unos relámpagos y escuchábamos unos truenos que daban miedo. En el coche estuvimos un buen rato hasta que aflojase un poco el temporal. 


Salimos corriendo del coche y nos vamos directamente al mirador que hay justo al lado del Visitor Center. Y esto es lo que vemos... el Gran Cañón bajo un cielo negro...


Un día de lluvia en Grand Canyon

Grand Canyon
La tormenta eléctrica no paraba de acechar con sus relámpagos y truenos. Volvió a llover y nos refugiamos en el Visitor Center. Todos hacíamos la misma pregunta: va a durar mucho este temporal??? Y la respuesta era que la cosa no mejoraría en las próximas horas.

Cuando la lluvia nos dio otra tregua volvimos a salir, los chicos del Visitor Center recomendaban que lo único que podíamos hacer era intentar hacer la ruta en coche, parando en los miradores. Era lo más seguro, y sobretodo aconsejaban que no nos acercáramos demasiado a los precipicios porque con este tipo de tormentas es peligroso. 

Decidimos hacer eso, pero aun así, casi no veíamos nada. Había mucha niebla. 




Nos quedamos impresionados cuando vimos que, al otro lado del cañón estaba todo el suelo blanco, parecía que había nevado. Era el granizo que había caído durante la tormenta!!!


Granizada en Grand Canyon

Granizada en Grand Canyon
Vaya granizada!!
Fue en este momento cuando vimos un par de coches parados a un lado de la carretera y Ana nos dice..... Para, para, que seguro que hay algún animal!! 

Y efectivamente, allí, muy de cerca, vimos a un Elk.




Hacía un frío que no esperábamos, y tuvimos que sacar unas sudaderas de nuestro maletero, porque nos habíamos puesto demasiado frescos nosotros... No esperábamos este día. Poco después decidimos darnos la vuelta, porque cada vez se veía menos el cañón, la niebla lo tapaba todo. 
Esto nos dejó un poco tocados, uno de los platos fuertes del viaje y casi no lo habíamos podido disfrutar.... En fin.... tendremos que volver... yuhuuuuu!!!!

Lo que habíamos planeado para este día era: hacer una ruta por la Route 66, pasando por Williams, Seligman y acabando por Kingman, para dormir en Laughlin, donde teníamos reservado nuestro hotel.

Pero todos estos planes se iban truncando, habíamos perdido mucho tiempo en el Gran Cañón. Comimos algo, de nuevo un pic-nic en el coche, y decidimos ir camino a Williams, a ver si teníamos más suerte y dejábamos la lluvia atrás.

Pero seguía lloviendo, aunque menos, cuando llegamos a Williams eran ya casi las 17.30h!!! :(

Williams me pareció muy bonito, creo que el pueblo que más me gustó de la Ruta 66, aunque también el más enfocado al turista. Lo tienen todo muy bien montado, moteles, gasolineras, coches clásicos, bares ambientados en la mejor de las épocas de la Mother Road, así es como se le llamaba a esta carretera que unía, el Lago de Michigan, por la parte de Chicago, Illinois, con Santa Mónica, California.


Route 66, Williams

Route 66, Williams

Route 66, Williams
Las siguientes paradas que teníamos previstas para este día ya no las pudimos hacer, cuando llegamos a Seligman era de noche y seguía lloviendo. Así que, seguimos hasta Kingman, donde paramos a cenar en un Denny's, una conocida cadena americana de Diners que está abierta 24h, y como no, los platos son abundantes. 

Desde Kingman hasta el hotel, en Laughlin, tan solo teníamos 20 minutos. Laughlin es un buen sitio para dormir a precios de risa. Pertenece a Nevada, y solo con cruzar el puente del río Colorado, que separa Nevada de Arizona, ya nos damos cuenta de donde estamos, solo vemos megahoteles con sus Casinos... Vamos que es un Las Vegas, pero a lo pequeño. 
Este fue el hotel más barato del viaje, 32$ la habitación de 4!!! 

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